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Hoy traigo un artículo de muerte. No he podido evitar iniciar esta entrada con un chiste tan malo pero es que, aprovechando que la muerte de Almodóvar está al caer, os voy a mostrar algunos de los epitafios más curiosos pertenecientes a personalidades relacionadas con el mundo del cine. Para aquellas personas que tengan un nivel cultural similar al de Leticia Sabater aclararé que un epitafio es aquella inscripción que se coloca sobre una sepultura. Si vuestro nivel educativo es equivalente o inferior al de Belén Esteban o Ana Obregón tampoco temáis, ya que una sepultura es simplemente una tumba. Como podéis obersevar, éste es un blog para todos los públicos. Comenzamos con todo un clásico que muchos conoceréis. El actor y escritor estadounidense Groucho Marx escribió en su lápida:


«"Disculpe que no me levante, señora"». 


En la tumba del gran Orson Welles (nuestro “Tercer hombre” {1949}) podemos encontrar:

«No es que yo fuera superior. Es que los demás eran inferiores».

Quien no conozca a Welles puede puede pensar que es un poco prepotente, pero bajo mi punto de vista creo que lo puso bromeando. En el caso de que lo dijera en serio, es Orson Welles. Sólo él se lo podría permitir.

En la tumba del sobrevalorado Marlon Brando encontramos:

«¡Otra vez protagonista de la ley del silencio!»

Se le olvidó añadir que esta vez no ganaría el Oscar.

Mi muy admirado Billy Wilder nos regala un epitafio en clave de humor.

«¡Soy escritor, pero es que nadie es perfecto!»

John Wayne, que puede que haya muerto en cuerpo pero jamás lo hará en alma, se sinceró en su lápida decorándola con un:


«"Feo, fuerte y formal"»

Mejor no se le puede describir. En la tumba que Wayne tiene en Nueva Inglaterra podemos encontrar otro epitafio, mi preferido, por la carga poética que conlleva. Una gran frase para uno de los más grandes de todos los tiempos.


«"Las lagrimas más tristes que se lloran sobre las tumbas son por las palabras que nunca se dijeron"»


«"Aquí yace Molière el rey de los actores. En estos momentos hace de muerto y de verdad que lo hace bien."» Esta frase pertenece a Molière un dramaturgo y actor francés. Un tipo con carisma donde los haya.


En el epitafio de Mel Blanc, el actor que doblaba la voz de Porky en la serie “Looney Tunes” de la Warner Bros, podemos encontrar por última vez la frase que le hizo famoso.


«“That’s all folks” ("Eso es todo amigos")»

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